El lunes 07 de noviembre, toda la comunidad educativa nos reunimos en el gimnasio de nuestro Instituto para dar inicio al mes de MARIA.
Desde hace algunas semanas, por los patios de nuestro colegio, ha peregrinado La Mesa de La Vallá, símbolo que nos habla de la fraternidad, de un sueño que está próximo a cumplir 200 años y que nos relata la historia de San Marcelino que se propuso que no hubiera nunca un niño o un joven que no supiera lo mucho que Dios le ama.
A través de un emotivo acto, la mesa de La Vallá acogió a quienes representan a toda nuestra comunidad educativa, la comunión entre laicos y hermanos, niños y jóvenes complementa y enriquece nuestra vida, no sólo hay lugar para algunos sino que nos necesitamos mutuamente uno al lado de los otros.
Con la mesa y el corazón preparados comenzamos a vivir el Mes de Nuestra Buena Madre, acompañada, especialmente, por los alumnos de pre kínder-kinder y los alumnos de cuarto medio, quienes viven sus últimos días en el colegio.
Los invitamos a ser parte del Mes de María con la oración que se realiza todos los días en el Hall de San Martín.