Allí nos esperaba la tía Mary Cavieres, Bibliotecóloga de profesión y vocación, quien respondió amablemente a todas las preguntas que los niños le hacían. Luego escucharon un cuento y recorrieron el interior de la biblioteca, observando con mucho asombro la gran cantidad de libros que se guardan muy ordenados en cada pasillo.

Sin duda esta experiencia acerca aún más a nuestros niños al maravilloso mundo de los libros, descubriendo en ellos la magia y la sabiduría de aprender.