A 170 años de la Pascua de nuestro Fundador, San
Marcelino Champagnat, la Comunidad Educativa del IRA le
rindió homenaje en solemne acto encabezado por el Rector
señor Claudio Arellano C. y por el Hermano Feliciano
Ortega, Superior de la Comunidad.
La ceremonia comenzó con la entonación del Himno
Nacional y prosiguió con la Oración, en la que tomó
parte el diácono Nelson Aravena y el Hermano Feliciano,
quien se refirió a la Espiritualidad Marista y a los
valores fundamentales del Carisma Marista.
Luego, vino el momento de la presentación
de la ofrenda ante el monumento al Fundador. Depositaron
la ofrenda el Rector del Colegio, el Superior de la
Comunidad y el Presidente del Centro
de Alumnos. Inmediatamente después se dirigió a los
presentes nuestro Rector, quien en parte de su mensaje
señaló:
Recordar la obra de Marcelino hoy es ver
a Jesús y a María diariamente en nuestras alumnas y
alumnos; es ver a Jesús y a María en la alegría que han
desbordado los niños y jóvenes del IRA durante estos
días de celebración. Es ver a Jesús y a María en las 88
alumnas y alumnos de tercero medio que recibieron el
sacramento de la Confirmación el viernes pasado y que se
prepararon durante un año con educadores nuestros; es
ver a Jesús y a María en aquellos que más necesitan, en
aquellas personas que el fin de semana pasado recibieron
a nuestros voluntarios en la localidad de Villa Prat,
donde se levantaron 19 viviendas de emergencia. Había
que salir deprisa para sembrar esperanza, para llevar
una palabra de aliento, una sonrisa y un abrazo
fraterno.
Aprovecho esta oportunidad para agradecer
el compromiso y el trabajo realizado por los doscientos
treinta voluntarios, entre los cuales hubo alumnas y
alumnos; docentes, administrativos, auxiliares, padres y
apoderados, exalumnos, todos formando una sola familia.
Esta cruzada solidaria, sin duda, le ha dado a la
celebración de la Semana Marista un sello distinto; le
ha dado más sentido, porque se ha iniciado ayudando a
nuestro prójimo más necesitado y eso, sin duda, es vivir
en plenitud el Carisma Marista, es ser hoy Champagnat.
A continuación, vino el momento de rendir
homenaje a los educadores Maristas que este año cumplen
25 años de servicio en nuestra Institución. Así, con
rostros emocionados, Luis Arratia Sepúlveda y Miguel
Ángel Aguilera del Valle recibieron el cariño y un
merecido homenaje en presencia de toda la Comunidad
Educativa.
Nuestro Rector y el Superior de la Comunidad les
entregaron sendas medallas de oro con la imagen del
Sagrado Corazón y los directores de Media Inicial y
Media Superior les
entregaron galvanos de reconocimiento por
sus 25 años cumpliendo la misión de formar buenos
cristianos y buenos ciudadanos en el IRA.
El acto concluyó con la entonación del Himno del
Colegio, para dar paso posteriormente al encajonamiento
de la banda y posterior desfile de los abanderados,
portaestandartes y todos los cursos. Así, nuestro
Colegio celebró al Padre Champagnat y renovó su
compromiso de seguir siendo fieles a la Misión Educativa
Marista.